El Perú se consolida como el principal productor mundial de fibra de alpaca y, al año, provee al exterior 7,000 toneladas de este insumo, principalmente a Asia, Estados Unidos y Europa, sumando en 2015 ventas por más de 159 millones de dólares, informó la Comisión de Promoción del Perú para la Exportación y el Turismo (Promperú).
Se indicó que el rubro de confecciones y prendas de vestir generó remesas de cerca de 47 millones de dólares durante 2015; 2.3% más que el año anterior.
Pero este liderazgo no solo se basa en la capacidad del país para posicionarse como el principal comercializador en el extranjero de la lana de este fino camélido sudamericano, señaló.
Perú posee el 80% de la producción alpaquera, lo que genera una oportunidad sobre otros países de producción textil porque permite posicionar origen en todo el proceso productivo.
“Organizaciones de alpaqueros, acopiadores, empresas de procesamiento y confección industrial y artesanal, así como hilanderas y diseñadores de moda forman parte de este sector que en los últimos dos ha tenido sus picos más altos de crecimiento”, apuntó.
Incluso, dijo, la región Arequipa, en donde se transforma industrialmente el 95% de la fibra, dispone dentro de su territorio con todos los elementos de la cadena de producción: desde la extracción de la lana, pasando por el procesamiento y teñido, hasta llegar a la confección de prendas con valor agregado.
Esta capacidad logística no la tiene ningún otro país productor de fibras naturales, resaltó.
Anoto que pese a que las prendas y textiles de alpaca peruanos ya se han introducido en 30 países, aún se requiere optimizar los procesos de producción y promoción para posicionar a esta fibra en un segmento de lujo, dado que menos del 25% de la fibra de alpaca se exporta como una prenda terminada.
Una de las estrategias para lograr este impulso internacional es la creación del sello Alpaca del Perú, la primera marca sectorial alineada a la Marca País, destacó.
Refirió que esta denominación (lanzada en 2014 por el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo y Promperú en coordinación con el sector privado) garantiza un estándar de calidad y asegura que el producto final no ha sido adulterado durante los procedimientos.
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