Sobre los 4.300 metros sobre el nivel del mar, en lo más alto de las montañas que dan al al cañón del río Apurímac, se esconde Waqrapukara, la joya escondida en las alturas de Cusco, acompaños a conocerla.
Perú no deja de sorprendernos, lugares fantásticos creados por los Incas se nos muestran para restregarnos en la cara todo el poder que lograron tener en tan poco tiempo y todas aquellas construcciones que hoy son el legado de todos los peruanos.
Waqra que traducido al español significaría «cuerno» y Pukara equivale a fortaleza. Esta enigmática construcción Inca, se eleva sobre los 4.300 metros sobre el nivel del mar, en la cumbre de una enorme quebrada cubierta de bosques que coronan los abismos que dan al cañón del río Apurímac.
El monumento arqueológico está rodeado de impresionantes andenes, plazas y un bosque de piedras que se semejan a tronos con gigantes mitológicos contemplando el paisaje cordillerano.
Waqrapukara, que aún no recibe grandes cantidades de turistas, es aún uno de aquellos lugares que se mantienen detenidos en el tiempo, todo el esplendor de la ingeniería Inca se fusiona perfectamente con los hermosos paisajes de su alrededor y las espectaculares formaciones rocosas.
Sólo basta un momento para darnos cuenta del poder que refleja este santuario, la arquitectura perfectamente ensamblada a la naturaleza y los 4 caminos que llevan a este enigmático lugar dan a entender que este era sin duda un santuario con un inmenso poder político y religioso aún no descifrado.
«Cuatro antiguos caminos llegan al sitio, pero antes de acceder a Waqrapukara se llega a un espacio vivo formado por la erosión fluvial y eólica. Todo el entorno natural advierte desde lejos que se está llegando a un sitio especial, fuera de lo común, de una belleza incomparable.
Sobre esta espectacular visión de formaciones naturales, los incas insertan una maravillosa arquitectura ceremonial, fusionando y haciendo suya toda la creación natural con lo mejor de su arquitectura artística.
Entre los años 2005 y 2008 , el arqueólogo cusqueño Miguel Colque Enríquez realizó un impecable trabajo de restauración, previa investigación para determinar profundidad de cimientos, técnicas constructivas y evitar que las estructuras colapsen.
Los investigadores coinciden en que la zona alberga otros yacimientos arqueológicos que podrían conformar todo un circuito turístico de primer nivel en el sur de Cusco. Se trata de Tambopukara, Yactapukara y Ayapukara, apenas conocidos por los lugareños.
Una de las rutas para llegar a Wakrapukara, se puede realizar tomando la autopista que va de Cusco a Puno, tomar el desvío en el kilómetro 91 por el puente Chuquicahuana, para ir rumbo al poblado de Acomayo. Siguiendo con el trayecto se toma un camino de herradura de aproximadamente 7.5 kilómetros hacia por ramal de Huáscar que va hasta la comunidad campesina de Huayqui.
El segundo acceso a Waqrapukara se realiza desde Sangarará siguiendo hacia el suroeste, a través de un camino de herradura de casi 15 kilómetros de longitud.
La tercera ruta pasa por la comunidad campesina de Huáscar, a través de un camino de herradura.
El cuarto camino, es a través de la comunidad campesina de Chosecani, siguiendo la huella de un camino prehispánico.
Cuatro caminos que llegan a un mismo lugar, caminos llenos de historia, caminos que fueron transitados en algún momento por los Incas.
Al llegar, lo primero es el asombro paisaje que rodea Waqrapukara, el páramo altiplánico es interrumpido por los bordes de un inmenso cañón. Feroces ráfagas de viento ascienden por los abismos formando caprichosas figuras en las cumbres de la quebrada.
Los arquitectos incas pretendieron dominar el paisaje sin transformar su espectacularidad., las curvas en las terrazas de piedra tallada parecen sujetar a el santuario, que semeja una corona de doble pico.
En medio de ella, hay una cueva natural con intervención inca y una pequeña ventana que da al abismo, que también permite una magnífica visión del cielo nocturno, poblado con constelaciones, planetas y estrellas de enorme valor en la cosmovisión inca.
El Ministerio de Cultura de Cusco ha implementado una zona para campamentos cerca al monumento arqueológico. Es necesario un buen equipo para caminatas y para soportar el frío nocturno, pero el premio es una vista incomparable en un destino poco conocido y que posiblemente pronto se llene de turistas, así que aprovéchalo!
0
0 
[…] Waqrapukara, la joya escondida en las alturas de Cusco […]